lunes, 14 de septiembre de 2009

Lo que conocemos como Colon Irritable


El Colon Irritable es una de las más frecuentes causas de consulta médica, tanto por la cotidianidad como por la intensidad de las molestias que provoca. Sus síntomas son cambiantes y los grados de molestias que causa son muy variados. Sin embargo, la importancia de poner atención a sus manisfestaciones, está dada por los riesgos que implica un diagnóstico equivocado, ya que muchas enfermedades orgánicas pueden simular sus síntomas.
La denominación “Colon Irritable” es poco adecuada ya que no hay un elemento específico de irritación, como tampoco está confinada al colon sino a todo el tracto intestinal. Otros nombres con la que se menciona son “Colopatía Funcional” o “Síndrome de Intestino Irritable”, aunque todas ellas adolecen de una descripción parcial.
En esencia, el Colon Irritable es la pérdida del balance neuromotor del tubo digestivo y que hace que éste funcione automáticamente. Es decir, para caminar debemos hacer movimientos voluntarios para que nuestras piernas se muevan, mientras que el intestino tiene su propia regulación, gracias al sistema neuromuscular que está en sus paredes. Sin embargo, este automatismo puede alterarse ya que nuestro sistema nervioso central está conectado al tubo digestivo, por vías nerviosas y endocrinas, de modo que nuestra vivencias, emociones, preocupaciones, etc. pueden de alguna forma modificar e interferir en este proceso automático finamente balanceado. Por tal razón, esta patología es frecuente en personas que presenten carga emocional por estilos de vida agitado, preocupaciones, estrés emocional, etc.
De esta manera, las manifestaciones más reconocibles del problema son de tres órdenes:
1) predominio de diarrea.
2) predominio de constipación.
3) alternancia entre períodos de diarrea y constipación.

En todo caso, en todas ellas se presenta la distensión abdominal, la flatulencia y los dolores difusos y de ubicación variable (generalmente de moderada intensidad).El Colon Irritable no es una enfermedad específica y no existen exámenes que la certifiquen.
De hecho, el tubo digestivo está anatómica e histológicamente normal y sólo existe una descoordinación de sus procesos de regulación motora. Por ello, el diagnóstico es sólo por descarte y es importante insistir en que igualmente los pacientes deben ser estudiados, ya que hay enfermedades de mayor complejidad que pueden imitar los síntomas del Colon Irritable.
El médico sabe que existen signos que pueden ponerlo en alerta hacia patologías diferentes. Entre estos signos podemos mencionar la baja de peso, el cambio brusco del hábito intestinal (estitiquez o diarrea de aparición súbita y mantenidas), la presencia de sangre en las deposiciones, la presencia de anemia o la persistencia de los síntomas en la noche interfiriendo con el sueño.Ahora, en cuanto al manejo de esta enfermedad, sus síntomas y cómo afecta a la vida diaria de las personas que lo sufren, es un tema que abordaremos muy pronto, por lo que lo más importante ahora es entender de qué hablamos.


En ningún caso el término irritable quiere decir que el intestino o colon se encuentren inflamados. De hecho no se ha logrado comprobar inflamación alguna al examinar a los pacientes con esta enfermedad.

El término se refiere más bien a que las terminaciones nerviosas en el intestino son hipersensibles y que los nervios que controlan los músculos del intestino son hiperactivos.
Así las cosas, un simple pasaje de gas en el intestino, u otro contenido a través de su extensión puede causar dolor o alteraciones en el tránsito intestinal de este intestino hipersensible y que se manifiesta habitualmente con diarrea o estreñimiento.

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